Salarios en época de Pandemia
Al igual que la pandemia es un evento inédito a nivel
mundial, también lo es lo que pueden
hacer los empresarios frente a esta
situación, por lo que no creemos que haya una solución fácil o universal a la
pregunta que todos debemos enfrentar.
Los expertos debaten si la declaración de emergencia
sanitaria por fuerza mayor, realmente configura la suspensión temporal de las
obligaciones laborales tanto del patrón (pagar salarios) como del trabajador
(prestar el servicio) y permite pagar 30 días de Salario Mínimo como
indemnización.
La propia ley establece que no podrá exceder esta
indemnización mas de 30 días, por lo que vamos a estar en ese supuesto a partir
del 1 de Mayo, entonces la suspensión
dejaría de ser temporal, para ser definitiva??
Con la reciente
noticia, que la duración supera los 30 días muchas empresas tendrán que hacer
un nuevo análisis para decidir si continúan resistiendo y en qué condiciones
deberán pagar, no 30 días a sus trabajadores, sino quizás 85 días.
Sugerencias:
A) Analizar cuáles son sus ingresos que pueden tener, al
mismo tiempo priorizar sus salidas para hacer un balance y ver hasta dónde
pueden resistir, y de ahí partir para hace tantos recortes como deban, tomando
en cuenta que los trabajadores van a preferir cobrar algo de su salario, a
verse sin empleo ante esta crisis que se avecina. Hablen con sus empleados y
traten de llegar a un acuerdo.
B) Si la pandemia los tomó en una situación vulnerable o de
plano las circunstancias del propio mercado no les permite que sobrevivan,
tienen 2 alternativas, pero no tomen ninguna decisión sin haber consultado con
un abogado laborista.
Si tienen algo de recursos que puedan distribuir una vez que
hayan garantizado su propia supervivencia familiar, pueden intentar hacer un
acuerdo con sus empleados, hablar con la verdad, ellos entenderán que la
pandemia es la única causa de su pérdida del empleo y aceptarían incluso pago
con inventario o bienes muebles.
La segunda es tomar la misma decisión que cientos de empresarios
ya tomaron, cerrar la empresa y que los abogados hagan su trabajo y tratar de
salvar lo que se pueda.
La realidad es que ante la masiva pérdida de empleos y
desaparición de empresas, el sistema y los trabajadores no pueden hacer nada,
les recuerdo que al igual que ellos, ustedes son la víctimas silenciosas de
este evento que no se puede prever ni superar en muchos de los casos.
De momento y hasta que no se levante la emergencia
sanitaria, prácticamente ninguna autoridad fiscalizadora van a tocar a sus puertas,
y luego van a dar prioridad al trabajo que tenían atrasado por la
pandemia, por lo que podemos prever que
tendrán tiempo suficiente para asesorarse bien con un abogado, e interponer los
medios necesarios en su beneficio.
Cada negocio y empresa es tan peculiar y distinta que
ninguna fórmula debe ser igual, por lo que me pongo a sus órdenes para platicar
con cada caso para buscar soluciones individuales.
El único consuelo que les puedo dar, es que después de un cuidadoso análisis de los
apoyos que el gobierno federal va a otorgar, podría casi garantizar que más del
60% de los trabajadores que van a perder su fuente de empleo van a recibir
apoyo de la Secretaria del Bienestar, si se acercan a ella.
Los únicos que al
parecer nos abandonaron a nuestra suerte, fueron al los empresarios que calificamos
como MIPYMES y que NO nos registraron en el censo de bienestar del 2019, que
por cierto ni siquiera sabía yo que existía.
Les deseo suerte a todos, y esperemos que una vez que se
acabe la emergencia, México se recupere como tradicionalmente lo hace ante
cualquier desastre.
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